Somos una organización costarricense fundada en el año 2002. Operamos legalmente bajo la figura de Asociación Civil Sin Fines de Lucro y nos consideramos una organización que aporta a la construcción de movimiento social organizado. Nos proponemos apoyar el fortalecimiento de las capacidades políticas de los actores locales y la construcción de espacios de coordinación y articulación multisectoriales de carácter regional y nacional, con miras a la construcción de una sociedad más justa y sustentable.
Acompañamos en el fortalecimiento de organizaciones comunitarias de los Territorios Indígenas y de comunidades campesinas costarricenses, para que puedan decidir sobre el modelo de desarrollo y formas de gobernanza autónomas, la protección de los bienes naturales, favorecer procesos de acceso a la justicia y atender las demandas que surgen en el marco de la crisis climática, con la participación activa de las mujeres y personas jóvenes.
Promover la construcción de modelos de vida locales y territoriales desde una perspectiva de equidad, dignidad y justicia; que incorporen la participación y la toma de decisiones colectiva en función del bien común, la igualdad y equidad de género y la convivencia en armonía con la naturaleza.
Ser una organización referente a nivel nacional y centroamericano capaz de generar alternativas locales de vida justa y sustentable, que contribuye a resolver situaciones de injusticia y ampliar el marco de derechos humanos, especialmente para las mujeres, para los pueblos indígenas y comunidades campesinas.
Para lograr esto, Ditsö desarrollará programas y proyectos para cada uno de sus ejes, que incluyan las perspectivas y agendas de las organizaciones territoriales y comunitarias, contará con condiciones óptimas de gestión, de infraestructura y de análisis crítico de la realidad para el desarrollo de su programa político y el de sus organizaciones aliadas.
1- Fortalecer la capacidad organizativa de comunidades campesinas e indígenas costarricenses en aras de que se amplíe su grado de control y decisión sobre sus asuntos políticos y sus bienes naturales y culturales.
2 - Ampliar el ejercicio efectivo de los derechos sociales, políticos, culturales y ambientales a través de la participación activa de sectores que enfrentan condiciones de desigualdad que vulneran sus derechos.
3 - Transformar las relaciones de poder patriarcales, racistas, clasistas y xenófobas que se tejen en los territorios, para que las mujeres indígenas y campesinas amplíen el acceso a sus derechos y puedan decidir sobre el modo de vida y desarrollo de sus territorios, desde sus propias visiones y demandas.